Podemos empezar diciendo que El Marqués de Sade, escritor y filósofo francés del siglo XVIII, fue el primero que utilizó este concepto en sus obras y el que dio nombre a esta práctica sexual como SadoMasoquismo.
Actualmente existen datos que evidenciaron la presencia del BDSM, al menos del Bondage y Dominación desde los principios de Mesopotamia (4 000 – 3 100 a.C.). Se encontraron datos que confirmaban celebraciones con prácticas de dominación, cross-dressing, estados alterados de consciencia y muchas actividades que combinaban éxtasis y dolor.
Eventualmente, en Grecia y Roma existieron múltiples ejemplos de rituales de flagelación durante el siglo IX a.C. en zonas religiosas como Esparta. inclusive se encontró la Tumba de los azotes en lo que fue Etrusca del siglo V a.C., en donde se encontraban imágenes de dos hombres azotando a una mujer en una práctica sexual. Así, hay mucha más información del bondage, dominación y otras prácticas que mezclan placer y dolor en esta época antigua.
Aún en el Medievo, se tenían prácticas que en la actualidad llamaríamos sadomasoquismo. Sin embargo, tuvieron que pasar algunos siglos para que el distinguido Marqués de Sade en la época de la ilustración francesa publicara sus libros que se distinguen por describir detalladamente las sádicas prácticas sexuales de los personajes ricos de su generación. De aquí nació el término Sadismo en honor al nobilísimo escritor. Mientras que el término de Masoquismo surgió con el libro de Venus in Furs publicado en 1870 del austriaco Leopold von Sacher-Masoch y su segunda esposa Fanny Pistor. Estos tres personajes se volvieron famosos por su sexualidad libertina, bautizando a las prácticas de sadismo y masoquismo como parte del erotismo, placer y sexualidad.
Actualmente, el BDSM cuenta con tres principales tendencias como lo describe Robert Bienvenu, sobre tres pilares el fetichismo europeo en 1928, el estadounidense que inicia en 1934 y el movimiento gay leather a partir de 1950 comenzando por personas de tendencia homosexual. Estas tendencias se diferencian en tipos de ropa, materiales y juguetes para adultos que suelen usar sus participantes. Sin embargo, con el nacimiento del internet, las tendencias del BDSM se unificaron, y el bondage, sumisión, soft-bondage y otras prácticas se añadieron a la riquísima variedad de la sexualidad.
El acrónimo BDSM
El término BDSM apareció por primera vez en abril de 1991, en torno al foro de noticias por Internet denominado alt sex, como la yuxtaposición de dos abreviaturas contrapuestas, BD Bondage y Dominación y SM SadoMasoquismo, que en realidad se habían creado, precisamente, para distinguir el sadomasoquismo que gozaba de una conocida mala imagen de las otras aficiones. Paradójicamente, desde el momento en que se trata de unificar ambas corrientes es cuando la subcultura que las engloba empieza un desarrollo vertiginoso. Dado que BDSM es una palabra que abarca términos muy dispares, no es fácil dotarla de una historia más allá del comienzo de su uso como acrónimo, al margen del que corresponda a cada uno de sus componentes.
Como elemento globalizador, el BDSM tiene escasas décadas de vida y se inicia cuando diversas asociaciones de activistas en E.E.U.U. e Inglaterra tratan de crear un mismo espacio subcultural para actividades hasta ese momento bien distintas, como la dominación, el bondage, el fetichismo o el sadomasoquismo. Es la época de la Old Guard, a mediados de la década de 1970, y su libro de cabecera es Leatherman’s handbook. Durante este periodo, el movimiento conserva su vinculación con el mundo ya sea de dominación o sumisión y rechazando la idea de admitir entre sus filas a activistas ambivalentes o switch, es decir, aquellos que se confesaban cómodos en ambos roles. También rechazaban frontalmente la admisión de quienes consideraban las relaciones B/D y S/M como solo juego y no como un símbolo de vida.
Fue hasta principios de la década de 1980 cuando el movimiento BDSM comenzó a englobar también a todo tipo de personas que quisieran practicarlo incluyéndolo como un juego sexual y otros.
A principios de la década de 1990, empezó lo que hoy se conoce como el periodo de la New Guard, Guardia joven o nueva, que se caracteriza por la decidida apertura hacia el mundo y la aceptación cualquier persona incluyendo el fenómeno switch, la inclusión de elementos de sensibilidad interior, dominación psicológica, relaciones D/S sin inclusión de rasgos sadomasoquistas, etc., la aceptación de quienes practicaban el sólo juego, y la participación activa de la mujer heterosexual en el asociacionismo BDSM ya que no veían a una mujer como dominante.
Robert Bienvenu, reputado conocedor de la temática y catedrático de sociología en la universidad de Indiana, Estados Unidos, expone una visión alternativa de la historia del BDSM, que él asienta sobre tres pilares: el fetichismo europeo de finales de los años 20, el estadounidense desde 1934 y el movimiento leather a partir de los años 50.
Existen distintos niveles para llevar un estilo de vida BDSM. Puedes comenzar conociendo los Principios y componentes básicos (aquí) y la Diversidad que hay (aquí) incluso saber mas sobre los fetiches sexuales (aquí) dentro del BDSM e investigando por ti mismo(a) qué sensaciones quieres experimentar y compartir en tus próximas sesiones de BDSM.